La designación del candidato de la patronal vizcaina Cebek a la presidencia de Confebask ha estado marcada por un nuevo enfrentamiento entre la Federación Vizcaina de Empresas del Metal y la propia Cebek, en la que la primera está integrada pero en desacuerdo con algunas de sus actuaciones. La presentación de una candidatura paralela a la oficial de Miguel Ángel Lujua, que resultó elegido por una amplia mayoría, en la persona de José Javier Arteche ha levantado alguna ampolla que otra pero ahora, según Vázquez Eguskiza, no es momento de mirar atrás. En un discurso claramente conciliador aboga por unir fuerzas en torno a Lujua, "el mejor candidato", para afrontar un mandato en Confebask marcado por unos momentos complicados en el devenir empresarial y en los que "la organización empresarial vasca tiene que volver a ganar peso en el seno de CEOE".
¿Qué perfil buscaron para elegir a Miguel Ángel Lujua?
Queremos una persona con características de líder, independiente, que sepa liderar organizaciones importantes con pautas modernas, valoramos muchísimo el modelo de calidad y excelencia, y valoramos el trabajo de Euskalit. También contemplamos los códigos éticos corporativos que a veces echamos en falta y que se tenga costumbre de tomar riesgos compartidos en decisiones importantes. Valoramos el conocimiento de las organizaciones empresariales vascas y de CEOE. Y buscamos una persona con costumbre de conciliar. Evidentemente buscamos un perfil de persona con lealtad a nuestra organización y a Confebask. Y con experiencia en Cebek, pues tenemos que conocer al que proponemos. Al final llegamos a la conclusión de que José Javier es bueno, pero Miguel Ángel es extraordinario y el comité propone a Lujua y la directiva decide por amplia mayoría designarle y si esto no es consenso que venga Dios y lo vea.
La Federación del Metal de Bizkaia criticó el proceso.
Puede parecer determinista pero se cumplió escrupulosamente con los procedimientos establecidos. Se conocen los dos candidatos y tras analizar los estatutos vemos que el comité ejecutivo tiene que ejercer su tarea estatutaria de proponer un nombre y una vez analizadas ambas candidaturas nos decidimos por 12 votos a favor de 12, -hay 13 pero el señor Sáenz de Gorbea, presidente de la FVEM, nunca ha ocupado su puesto-. Luego le proponemos a la Junta Directiva, -que es la que tiene que decidir la candidatura de Lujua para su aprobación, rechazo o abstención-, y por una muy amplia mayoría aprueba a Miguel Ángel Lujua como candidato de Cebek para presidente de Confebask pero podría haber dicho vuestro candidato os lo tragáis.
¿Se enteró de la candidatura de Arteche por los medios de comunicación?
No, me enviaron una carta notificándolo.
¿Usted se planteó ser el próximo presidente de Confebask?
Nadie habrá escuchado que yo me haya posicionado para presidente de Confebask. Si eso se suponía no era así. Podrá tener una lógica pero no había nada. Se me atribuye esta apetencia y había gente mía que pensaba que era así. En todo caso siempre he entendido que hay que adoptar las decisiones que fuesen mejores para la organización empresarial. Y yo estoy al servicio de los empresarios y creemos que Cebek propone un buen presidente.
¿Han existido interferencias externas en el proceso de elección?
No ha habido interferencias de otras organizaciones empresariales de hecho nuestras relaciones con SEA, Adegi o la misma Confebask, son buenas, pero en relación a la candidatura del Metal nos hubiera gustado que se hubiese planteado en estos despachos antes que en otros. Pero todo esto es pasado y estamos ya en otra época. Nuestro candidato, el de todos, es Miguel Ángel Lujua.
¿Se pueden arreglar las desavenencias con el Metal de Bizkaia?
Me comprometo a hacer lo posible. En breve plazo voy invitar a la FVEM a que nombremos dos delegaciones cualificadas, en las cuales no necesariamente tengamos que estar los presidentes, para analizar lo que ocurre desde hace tres años, para hablar de las cosas donde se debe, para conciliar posturas y buscar soluciones.
Se ha cuestionado que se haya optado por un gestor más que por un empresario. ¿Hay algún elemento que diga que el presidente de la organización empresarial tenga que ser necesariamente un propietario de empresa?
Ni en Confebak ni en Cebek. Claro está que en Cebek hay un aprecio especial a los propietarios que siguen gestionando dignamente sus compañías. ¡Como no va a ser así¡, pero también hay una realidad y es que en la práctica empresarial actual y eso se ve en la entrega de los diferentes premios a empresarios en Euskadi los citados galardones se los dan a los CEO [chief executive officer] de las compañías, grandes o pequeñas. Considerar solo a los empresarios patrimoniales es un debate antiguo. Cualquier persona corre con un riesgo patrimonial por su propio trabajo y ¿qué decir de un consejero delegado que tiene un 30% de su salario ligado a bonus por los resultados de las empresas? Ser propietario no debe cualificar, por sí solo, a un candidato para llevar la representación de Confebask. Siendo un buen argumento no es el único. Hay que valorar otros criterios como liderazgo, gestión, modernidad, transparencia, dedicación de tiempo, conocimientos interdisciplinares e interterritoriales porque estamos en un momento en que creemos que es importante hacer una buena labor en Confebask y resituarnos en CEOE.
Ustedes no han dejado de considerar a Arteche como una persona muy válida.
Sin duda. En Cebek pensamos que José Javier Arteche tiene un papel clave en el Metal de Bizkaia y en el futuro en la política de conciliación porque se le respeta y puede ayudar a mejorar las cosas.
La FVEM ha planteado un debate sobre el modelo de Cebek.
Y se puede hablar perfectamente. Nosotros hemos trabajado por una Cebek equilibrada con representación de todos, grandes y pequeños. No hay que olvidar que el CIMV era una gran patronal de sectoriales incompleta y ahora es eso, más empresas individuales, más sectoriales de empresas más pequeñas. Con una representación en función de las cotizaciones pero de todos. Hay otros modelos como el de CEOE, en el que hay empresas grandes que pagan y no participan. Nosotros queremos que estén todos. Que tengamos unos órganos con representación de Iberdrola, BBK, Euskaltel, Naturgas o IMQ es un lujo que nos da prestigio y mucho conocimiento. Por otro lado, los servicios cada día gana más peso en la economía en relación a la industria, y el comercio, la sanidad, la biotecnología tienen que estar representados también en los órganos de dirección de la organización de Bizkaia.
Hablando de Confebask, en Madrid se está negociando algo tan fundamental como la reforma de la negociación colectiva y tanto Confebask como el sindicato mayoritario vasco ELA está fuera de juego de lo que se cuece allí.
Desde Cebek tenemos claro que en el próximo mandato Confebask tiene que recuperar peso en el seno de CEOE. El empresariado vasco tiene que volver a contar con más presencia en el seno de la patronal del Estado. Eso, junto con favorecer la internacionalización y las alianzas de las empresas, va a ser clave.

